A punto de terminar la semana santa, os muestro alguna de las canciones que se utilizan en las procesiones para acompañarlas, además de una pequeña reflexión sobre la música en las procesiones.
Como sabéis, a lo largo de la historia, la música ha sido un importante aliado para hacer llegar la palabra de Dios al pueblo. De hecho, en la notación neumática del canto gregoriano encontramos la base de lo que sería nuestro sistema de notación musical actual. Desde entonces, la música ha servido como acompañamiento para los actos religiosos no sólo en la comunidad cristiana. En diferentes tribus por ejemplo se utiliza la música para alabar a un dios, o acompañar una muerte por ejemplo.
En nuestro caso, en la Semana Santa se utiliza la música para acompañar las procesiones, que al fin y al cabo es una representación de la pasión de cristo seguida por millones de personas. Normalmente bandas de música, desfilan por las calles llenándolas de energía y sentimientos varios (tristeza porque Jesús ha muerto, alegría porque viene la virgen, etc).
Uno de los instrumentos más importantes (por no decir el que más) es el tambor. Crea unidad y cercanía en todas las personas de la misma cofradía/hermandad. Además de aportar un sentimiento de grupo y unidad a las personas de dentro de la procesión también aporta a los espectadores cierto respeto y tensión. Si a los tambores les sumamos una banda que los acompañe, la experiencia puede ser muy grata para todos los oyentes, ya que están siendo acompañados e invadidos por una música, que ha sido interpretada especialmente para esa procesión, y para ese momento.
Aunque hay distinta música dependiendo del día de procesión, el trono y la ciudad, algunos ejemplos de melodías que están sonando esta semana santa son las que os pongo a continuación:
¿Oyes música? Cierra los ojos, adéntrate en la música a intenta sentir lo que el autor trató de transmitir con la canción.
Déjate emocionar y llevar por el aire de marcha y las distintas melodías. ¿Os imagináis una procesión sin nada de música?