jueves, 15 de noviembre de 2012

Musicoterapia para reducir el Bullying

Hoy os hablo de Bullying: os presento un resumen de las conclusiones de unos estudios realizados en Chile y México sobre esta problemática: La musicoterapia puede ayudar a reducir el Bullying escolar. 

Definimos Bullying como cualquier forma de maltrato psicológico, verbal o físico, producido entre escolares de forma reiterada a lo largo de un tiempo determinado. Predomina la violencia emocional, dándose mayoritariamente en aula y patio de los centros escolares, siendo los protagonistas niños y niñas en proceso de entrar en la adolescencia (12-14 años).

Se ha observado, que uno de los mayores problemas del Bullying es la falta de comunicación existente entre agresor, agredido, cuidadores y profesores, por lo que la musicoterapia puede ser un buen método para abrir canales de comunicación entre los distintos actores que protagonizan la problemática y ayudar a reducirlo. A través de la musicoterapia, se desarrolla la comunicación no verbal, y la expresión e interacción de una forma fluida, y produciendo "descargas emocionales y físicas" que liberarán las tensiones de convivir en un grupo cerrado. Además, también permite jugar, descubrir y compartir, por lo que también ayuda a vivir una experiencia conjunta en un contexto diferente. Ya no sólo son importantes las palabras, sino que los gestos, las miradas, los movimientos, los sonidos, las melodías, las risas... ahora tienen un papel mucho más importante.
Vivimos en tiempos muy duros, en donde el maltrato físico y psicológico  se comparte 
y se practica a plena luz del día, a veces de forma constante. Estudios como éstos  que provienen 
de Chile y México demuestran la efectivida dde la musicoterapia para reducir esta problemática. 
¿Será falta de comunicación? ¿Será falta de técnicas de autocontrol? ¿Serán problemas de habilidades sociales? 
La musicoterapia puede ser muy recomendable para trabajar estos problemas.

El profesor Ramón Robles, de la universidad de Santiago de Chile ha ideado un programa para manejar la agresividad de jóvenes estudiantes. Además también enseña a los afectados técnicas de respiración y baños de sonido (usando instrumentos como el cuenco tibetano). Los objetivos son reducir la agresividad, mejorar la productividad, facilitar la comunicación y promover la expresión individual.
Robles asegura que cuando un niño es muy agresivo y se le aplica este método, se generan sentimientos de culpa que provocan llanto y el reconocimiento de que ha actuado mal. Los estudiantes, mientras se les aplica el programa, padecen rabia, frustración, angustia y tristeza. 
Digamos que en las sesiones, al proporcionar un espacio de comunicación diferente, cada persona es capaz de expresar y darse cuenta como se siente, y como hace sentir a los demás, por lo que puede ser muy beneficioso. Y las técnicas de respiración y relajación, también sirven para mejorar el autocontrol y ahondar en tu interior relajado.

Por otro lado, el médico mexicano Mario Sánchez, se ha percatado de que las vibraciones musicales, al resonar de tal forma en las ondas cerebrales y generar diferentes sustancias (dopamina y serotonina entre otras), puede llegar a producir cambios de conducta. Mario habla de escuchar música mientras se hacen los deberes en vez de ver la televisión, y de practicar Yoga, como otros complementos a la musicoterapia para lograr reducir el Bullying.

Diferentes personas de diferentes lugares pero señalando el gran poder que tiene la musicoterapia para mejorar la calidad de vida de las personas en el entorno escolar. Estos estudios, pueden ser aplicables a otros ámbitos que tampoco están demasiado investigados y contrastados empíricamente, como puede ser musicoterapia para violencia de género o musicoterapia familiar. Diferentes usos de la musicoterapia pero con un mismo objetivo común: Desarrollar nuevas formas de comunicación y expresión, compartiendo melodías, ritmos y emociones en lenguaje tanto verbal como no verbal.


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